El ministerio fluye desde la comunión, y el poder brota más de la oración

en un lugar solitario que del reconocimiento en una ciudad llena de gente.

Al meditar en la palabra: "Y se difundió más la fama de Jesús; y se agolpaba multitud para oírle y ser sanados de sus enfermedades; pero él se retiraba a lugares solitarios y oraba" [“Pero la fama de Jesús se extendía aún más, y muchas personas se reunían para escuchar sus palabras y ser sanadas de sus enfermedades. Sin embargo, Jesús se retiraba a menudo a lugares tranquilos para orar” (Biblia para la Gente de Hoy)] (Lucas 5:15-16), quiero recibir la enseñanza que esta palabra me da:

1. Al meditar en esta palabra, el 26 de diciembre de 2024 me vino a la mente el título de la meditación: “El eje más importante de todo el ministerio de Jesús (vida pública)”. En aquel momento, meditando en Marcos 1:35, que dice en la Biblia para la Gente de Hoy: “Muy de mañana, Jesús se levantó y se fue a un lugar solitario a orar”, reflexioné sobre seis puntos acerca de la oración:

(a) Primero, pienso que quizás las reuniones de oración matutina en la iglesia coreana se basan en esta palabra.

(b) Segundo, el término “muy de mañana” indica un ‘tiempo de quietud’ (quiet time). Me viene a la mente el himno 539, estrofa 1 y coro: “Acércate tranquilamente a Jesús, deposita todas tus cargas, cree en el amor de su cruz y recibe el perdón de tus pecados. Acércate tranquilamente a Jesús, entrega tu corazón; el Señor que ve en secreto te concederá gran gracia.”

(c) Tercero, considero valioso comenzar el día con el hábito de la oración.

(d) Cuarto, “lugar solitario” (en la versión Reina-Valera “lugar apartado”) indica un ‘lugar tranquilo’ (quiet place). Según Marcos 6:32 (Biblia para la Gente de Hoy): “Entonces se fueron en barco a un lugar solitario”. Creo que cada uno de nosotros necesita un lugar de oración personal.

(e) Quinto, al meditar que Jesús se acercaba a Dios Padre en oración en tiempos tranquilos y lugares solitarios, recuerdo lo que dijo Henri Nouwen sobre convertir el desierto solitario en un jardín de soledad. La diferencia entre soledad y estar solo es que estar solo es simplemente no tener compañía, mientras que la soledad es estar con Dios. Sin embargo, vivimos en medio de ciudades y sentimos soledad. Sentimos una soledad más temible en medio de multitudes que en el desierto. Peor aún, no tenemos la capacidad de transformar esta soledad en un jardín de soledad. Es decir, no experimentamos el poder de la oración. Preferimos hablar con amigos cercanos en lugar de dialogar con Dios, y escuchar voces humanas en lugar de la voz de Dios. Preferimos el tiempo conectado a internet con personas que el tiempo a solas con Dios. Quizás no sentimos la presencia de Dios porque no disfrutamos de la soledad y rechazamos demasiado la sensación de estar solos. Necesitamos acostumbrarnos a estar un poco solos. Necesitamos entrenarnos a estar solos con un corazón tranquilo en un tiempo y lugar tranquilos. En ese entrenamiento, experimentaremos que Dios está con nosotros, desarrollando la capacidad de convertir el desierto solitario en un jardín de soledad.

(f) Sexto, considero que el hecho de que Jesús se retirara a lugares solitarios y tuviera íntima comunión con Dios Padre fue el eje más importante de todo su ministerio público.

2. Al continuar meditando en Lucas 5:16, lo relacioné con Lucas 5:15 (Biblia para la Gente de Hoy): “Pero la fama de Jesús se extendía aún más, y muchas personas se reunían para escuchar sus palabras y ser sanadas de sus enfermedades. Sin embargo, Jesús se retiraba a menudo a lugares tranquilos para orar.”

(a) Me llamó la atención que, cuando la fama de Jesús se extendía y la gente se reunía para escucharle y ser sanada, él se retirara a un lugar solitario a orar. Creo que si mi fama se extendiera de manera similar, probablemente sentiría que debo aprovechar la oportunidad para predicar, y no me retiraría a orar.

(i) Esto me hace reflexionar sobre la prioridad de Jesús. En una reunión familiar reciente con mi hijo Dylan, mencioné que como siervos llamados por Dios, nuestra prioridad no es el ministerio, sino la comunión íntima con Dios. Actualmente, el Espíritu Santo me ha concedido la gracia de tener encuentros personales con Dios en el santuario de la iglesia Victory. La meditación de Lucas 5:16 me recuerda que mi prioridad debe ser la comunión con Dios, no el ministerio en sí.

• En una meditación previa (22 de julio de 2020) escribí: “A través del Espíritu que habita en nosotros, podemos disfrutar de la comunión con el Padre, que nos ama profundamente, y con el Hijo, que ofreció su vida por nuestros pecados, lo que nos llena de gozo y nos capacita para obedecer sus mandamientos y amarnos unos a otros. Esto nos permite experimentar cuatro bendiciones de obediencia: (1) reconocer que pertenecemos a la verdad, (2) fortalecer nuestro corazón ante Dios, (3) recibir todo lo que pedimos a Dios, y (4) saber que el Señor habita en nosotros a través del Espíritu.”

3. Al meditar en Lucas 5:16, me interesé en tres palabras griegas:

(a) “Se retiraba” (ὑποχωρῶν, hypochōrōn). Esta palabra aparece solo en Lucas 5:16 y 9:10. Muestra que Jesús se retiraba intencionalmente con un propósito:

1. En Lucas 5:16, se retiraba para tener comunión con el Padre, haciendo de la soledad y la oración un elemento esencial de su ministerio.

2. En Lucas 9:10, después de un ministerio intenso, se retira con los discípulos a un lugar solitario, mostrando que la retirada sirve para renovación, evaluación y preparación para la siguiente etapa del servicio.

• La lección es que debemos alternar el servicio hacia afuera con la renovación interior para mantener la vitalidad espiritual.

(b) “Lugar solitario” (ἐρήμοις, erēmois). Originalmente significa un lugar no cultivado, despoblado y desolado, ofreciendo tranquilidad y sin interrupciones. En la Biblia, estos lugares desolados se convierten paradójicamente en espacios donde Dios se manifiesta con provisión y presencia.

• La motivación del desierto para Jesús puede resumirse en cuatro puntos:

1. Tentación y victoria.

2. Oración y soledad: un retiro estratégico para la recarga espiritual. El ministerio fluye desde la comunión, y el poder brota más de la oración en un lugar desolado que del reconocimiento en ciudades llenas de gente.

3. Milagros de provisión.

4. Enseñanza y revelación.

• Aunque prefiero naturalmente el ministerio en medio de multitudes, Dios desea que me retire a lugares solitarios, confiando en la obra de la cruz de Jesús y siguiendo la guía del Espíritu, para tener comunión íntima con el Padre. Como dice Henri Nouwen, debo comprometerme a convertir el desierto solitario en un jardín de soledad. La diferencia entre soledad y estar solo radica en que la soledad implica la presencia de Dios. Necesitamos entrenarnos para estar solos en un lugar y tiempo tranquilos, experimentando la presencia de Dios y transformando la soledad en un espacio fructífero.

(c) “Oraba” (προσευχόμενος, proseuchomenos) significa literalmente ‘intercambiar deseos’, es decir, convertir los pensamientos humanos en los deseos de Dios, interactuando con Él. La oración en el Nuevo Testamento está estrechamente vinculada con la fe.

• Me recuerda la oración de Jesús en Getsemaní: “Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Mateo 26:39; Marcos 14:36).

• También me recuerda Romanos 4:21, donde Abraham confió plenamente en que Dios cumpliría su promesa, incluso en circunstancias imposibles.

• Que Dios me permita experimentar humildad a través del sufrimiento y confiar en sus promesas, como Jesús en Getsemaní: “Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Mateo 26:39; Marcos 14:36).