¿Qué es la Iglesia?

[Hechos 7:44-50]

Un artículo del Miju Gospel News (11 de junio de 2006) titulado "La iglesia alternativa que supera los 20 millones, iglesia en casa: cultos sin pastor, libre elección de días para el culto, tendencia en aumento" describe la situación de las iglesias en el siglo XXI, dividiéndolas en siete tipos principales:

Iglesias mega (Mega-Church): Las iglesias mega son aquellas que tienen más de 2,000 miembros en los cultos dominicales. "La característica principal de estas iglesias es su diversificación de actividades secundarias. No solo operan tiendas, sino que también realizan seminarios pagos y operan instalaciones de entretenimiento como fuentes principales de ingresos. Para crear diversas oportunidades de negocio, es básico contratar a expertos con títulos en Administración de Empresas (MBA)" (Internet).
Meta-iglesias (Meta-Church): El término "meta" hace referencia al cambio, por lo que una meta-iglesia se considera una iglesia en transición. Carl George, un experto en crecimiento de iglesias en EE. UU., define las iglesias del futuro como meta-iglesias, argumentando que las iglesias de la próxima generación inevitablemente cambiarán. "El pastor de la meta-iglesia debe tener una espiritualidad sólida, pero también debe saber cómo renovar estructuralmente la iglesia para adaptarse a la sociedad del futuro. La meta-iglesia busca cambios mientras mantiene la calidad de sus funciones espirituales" (Internet).
Iglesias por televisión, radio o internet: Este tipo de iglesia se refiere a aquellas en las que se adora a Dios a través de los medios de comunicación, como la televisión, la radio o internet, en lugar de acudir físicamente al lugar de culto.
Iglesias estilo Wal-Mart (Wal-Mart Church): Se caracterizan por la masificación y la comercialización de la iglesia, siguiendo el modelo de la cadena de tiendas Wal-Mart.
Iglesias tradicionales: Son las iglesias que siguen los patrones y estructuras más antiguos y tradicionales.
Nuevas iglesias diferenciadas (New Church): Se trata de iglesias que buscan diferenciarse de las tradicionales, proponiendo formas innovadoras de adoración y organización.
Iglesias en casa (House Church): Este tipo de iglesia se reúne en casas, en lugar de en un edificio eclesiástico tradicional.

Según una investigación de Barna Research sobre las actitudes y comportamientos religiosos de los adultos en EE. UU. durante los últimos 25 años, más de 20 millones de estadounidenses han dejado de asistir a iglesias convencionales desde el año 2000 y han adoptado alternativas como iglesias en casa, ministerios en el trabajo o cultos a través de internet. Estos movimientos atraen a las personas porque buscan una relación más profunda con Dios y con los demás, además de poder tener la libertad de elegir cuándo y cómo adorar, sin estar limitados al horario dominical (Internet).

Un artículo sobre este tema evalúa la situación de la siguiente manera: "El culto sin pastor y sin un día fijo, escogido libremente, basado en el pensamiento humano y la comodidad, plantea la pregunta de si 'es Dios el centro o es el ser humano el centro'. La expansión acelerada de las iglesias en casa probablemente sea un factor que detendrá el crecimiento de las iglesias tradicionales" (Internet).

Entonces, ¿qué tipo de iglesia debemos ser? Hoy quiero meditar sobre tres lecciones basadas en Hechos 7:44-50 para entender qué tipo de iglesia debe ser la nuestra. Mi deseo es que nuestra iglesia se convierta en una iglesia basada en la Palabra de Dios.

Primero, la iglesia es el tabernáculo de testimonio.

Mira el pasaje de Hechos 7:44:
"Nuestros padres tenían el tabernáculo del testimonio en el desierto, como el que le ordenó hacer el que habló a Moisés, según el modelo que había visto."
¿Por qué Esteban habla sobre el tabernáculo del testimonio en su discurso? Él está aclarando a los que lo perseguían que los israelitas en el tiempo del Éxodo no cometieron el pecado de adorar a "Moloc" o a la "estrella de Refán" debido a la falta de un tabernáculo de Dios. Él les explica que el pecado de idolatría no fue por la ausencia del tabernáculo, sino por la obstinación de su corazón (Hechos 7:43).

Entonces, ¿qué es el tabernáculo del testimonio?
El tabernáculo del testimonio es el lugar central para la adoración, donde se colocaba el arca del pacto. También se le conoce como el lugar de revelación. Este tabernáculo fue el lugar visible de la presencia de Dios para el pueblo de Israel. Fue construido por Moisés según las instrucciones dadas por Dios (Hechos 7:44) y luego llevado por Josué al entrar en la Tierra Prometida. Estuvo presente hasta el tiempo del rey David (Hechos 7:45). Así, este tabernáculo o tienda era una prueba de que Dios habitaba con Su pueblo, Israel.

¿Cómo podemos aplicar el hecho de que la iglesia es el tabernáculo del testimonio a nuestra iglesia?

El tabernáculo del testimonio como lugar central de adoración:
El hecho de que el tabernáculo sea el centro de la adoración nos enseña que nuestra iglesia debe poner la adoración como una prioridad. Debemos esforzarnos por adorar a Dios en espíritu y en verdad.

Veamos lo que dice Juan 4:23:
"Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu, y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren."

El tabernáculo del testimonio como lugar de revelación:
El tabernáculo también es conocido como el lugar de la revelación, y esto nos enseña que nuestra iglesia debe ser una iglesia de bendición, donde la revelación de Dios sea evidente.

¿Cómo sabemos esto? En Mateo 16:16-17, cuando Jesús le preguntó a Sus discípulos, "¿Quién dicen los hombres que soy Yo?" Pedro respondió: "Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente". Jesús le respondió:
"Bienaventurado eres, Simón hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos."
La verdadera bendición es cuando Dios Padre revela quién es Jesús, y a través de esa revelación, tenemos la fe correcta y una confesión genuina de Jesús como el Cristo.

La iglesia como el tabernáculo del testimonio de Cristo:
Esto nos enseña que la iglesia debe testificar sobre quién es Jesús. En otras palabras, debemos vivir en una fe confesional, donde descubrimos la verdad de quién es Jesús a través de la revelación de Dios. La iglesia debe ser un testimonio de Jesús a través de nuestras vidas. Así es como una iglesia verdaderamente se convierte en una iglesia.

En segundo lugar, la iglesia es la morada de Dios.

Veamos Hechos 7:46:
"David halló gracia delante de Dios, y le pidió que hallara una morada para el Dios de Jacob."
Esteban señala que el deseo de David de construir la casa de Dios no era para Dios mismo, sino para la casa de Jacob (Hechos 7:46). Esto enfatiza que el templo no es para Dios, sino para el pueblo de Jacob, el cual es el lugar donde los israelitas sirven y se dedican a Dios. El templo no debía ser un lugar donde se "enjaulara" a Dios para manipularlo según los deseos humanos.

Esteban rechaza la falsa idea de los líderes religiosos judíos que querían encerrar a Dios en el templo de Jerusalén y declara la independencia de Dios del templo (una falsa comprensión de la idolatría). Los líderes religiosos judíos parecían haber adorado el templo de Jerusalén como si fuera el único lugar donde Dios pudiera estar, cometiendo el error de tratar de limitar a Dios dentro de esos muros.

La morada de Dios es el lugar que Él mismo construyó para habitar con el pueblo de Israel (Éxodo 25:8).
Veamos lo que dice Éxodo 25:8:
"Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos."
Así, el pueblo de Israel debía adorar a Dios en Su morada, servirle fielmente y expresar su dedicación hacia Él de una manera humilde. Sin embargo, ellos profanaron el santuario de Dios, el lugar donde Él debía habitar. En lugar de valorar la presencia de Dios, pusieron mayor énfasis en el edificio del templo. Esto se asemeja a lo que ocurre en la actualidad en muchas iglesias, donde el edificio de la iglesia se valora más que la verdadera presencia de Dios entre Su pueblo. Si una iglesia no puede demostrar que Dios está habitando entre Su pueblo, no se puede decir que esa iglesia sea una iglesia verdadera.

La iglesia debe ser un testimonio de que Dios habita entre nosotros.
Este es el mensaje: nuestra iglesia debe ser un testimonio de que Dios habita con nosotros. ¿Cómo podemos demostrar que Dios habita con nosotros en nuestra iglesia?

Podemos testificar que Dios habita con nosotros a través de la adoración.
Veamos lo que dice 1 Corintios 14:25:
"Los secretos de su corazón se hacen manifiestos; y así, postrándose sobre su rostro, adorará a Dios, declarando que Dios está verdaderamente entre ustedes."
Cuando los miembros de la iglesia de Corinto experimentaban la presencia de Dios en su adoración, incluso los no creyentes reconocían que Dios estaba verdaderamente entre ellos. A través de la adoración, debemos demostrar que Dios está con nosotros como comunidad.
Podemos testificar que Dios habita con nosotros a través de una vida de obediencia a Su palabra.
En otras palabras, cuando vivimos por la fe en Emanuel, podemos demostrar que Dios está con nosotros.
Veamos lo que dice Mateo 1:23:
"He aquí, la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros."
Cuando vivimos con la fe de que Dios está con nosotros, somos un testimonio de Su presencia.
Podemos testificar que Dios habita con nosotros a través de la oración.
Veamos lo que dice Deuteronomio 4:7:
"¿Qué pueblo hay tan grande, que tenga a sus dioses tan cercanos, como lo está Jehová nuestro Dios, siempre que le invoquemos?"
A través de la oración, podemos testificar que Dios está cerca de nosotros, y que Él habita con nosotros.

Por último, en tercer lugar, la iglesia es un lugar de descanso.

Veamos el versículo de hoy, Hechos 7:49:
"El Señor dice: El cielo es mi trono, y la tierra es el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis, dice el Señor, o cuál será el lugar de mi reposo?"
Esteban está atacando la actitud equivocada de los miembros del Sanedrín hacia el templo. Ellos estaban idolatrando el templo de Jerusalén, y Esteban les señala este error. El profesor Yu Sang-seop dice:
"Esteban no rechazó el templo en sí, sino el abuso y la idolatría del templo por parte del pueblo. El problema no está en el templo mismo, sino en la actitud hacia el templo (la idolatría del templo)" (Yu Sang-seop).
¿Acaso un templo hecho por el hombre puede contener al Dios que creó el universo? La respuesta a esta pregunta es "no", como se indica en Hechos 17:24:
"El Dios que hizo el mundo y todo lo que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas."
Este mismo hecho lo sabía Salomón (1 Reyes 8:27) y también el profeta Isaías lo entendió aún más claramente (Isaías 66:1-2).

¿Cómo se puede aplicar la idea de la "morada de Dios" a nuestra iglesia?
En otras palabras, ¿qué debemos hacer para que la iglesia del Señor sea una morada para Él?
Podemos encontrar la respuesta en Salmo 132:7-9:
"Entraremos en su morada; postraremos nuestros pies ante su estrado. Levántate, Jehová, y ven a tu reposo, tú y el arca de tu poder. Que tus sacerdotes se vistan de justicia, y que tus santos se regocijen."

Debemos ofrecer una adoración correcta (Right Worship).
Dios desciende a habitar en Su morada cuando le ofrecemos una adoración genuina y correcta.
Debemos vivir una vida correcta (Right Life) ante Dios.
A quienes ofrecen una adoración correcta, se les exige vivir una vida conforme a esa adoración. Debemos vivir rectamente en un mundo injusto. Al hacerlo, Dios descenderá a Su morada.

¿Qué es la iglesia que el apóstol Pablo menciona en 1 Corintios 3:16?
Nosotros somos la iglesia:
"¿No sabéis que sois el templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?"
La Biblia enseña que tú y yo somos el templo de Dios, y que el Espíritu Santo habita en nosotros.
Entonces, ¿qué tipo de iglesia debemos ser?
Veamos lo que dice 1 Corintios 3:17:
"Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios es santo, y eso sois vosotros."
Y en 1 Corintios 6:19-20:
"¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios."

Sirviendo a la iglesia que el Señor ha establecido,

Pastor James Kim
(Compartiendo sobre el sueño de tener una iglesia auténtica)