“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud…”

[Eclesiastés 12:1-8]

Ya recibimos dos enseñanzas que el rey Salomón da a los jóvenes bajo el título “Joven” basándonos en Eclesiastés 11:9-10:
(1) Primero, los jóvenes deben disfrutar de su juventud, pero con moderación para no pecar contra Dios. Es decir, los jóvenes deben recordar el juicio de Dios y, aunque disfruten de la vida diaria, las relaciones conyugales y el trabajo, deben hacerlo buscando la pureza de conducta conforme a la palabra de Dios.
(2) Segundo, los jóvenes deben eliminar las preocupaciones del corazón y la maldad del cuerpo.

En el texto de hoy, Eclesiastés 12:1, el rey Salomón dice:
“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que lleguen los días malos, y antes que se acerquen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento.”
Debemos recordar a nuestro Dios creador.

¿Saben cuándo debemos recordar a Dios, nuestro Creador? Es precisamente en “los días de la juventud”. Es decir, cuando somos jóvenes y fuertes, debemos recordar a nuestro Creador. ¿Por qué? Porque pronto llegarán los días difíciles (v.1). ¿Qué clase de días son esos “días difíciles” para mí y para ustedes? Son los días en que decimos: “No tengo en ellos contentamiento” (v.1). ¿Cuándo solemos decir eso? Cuando somos viejos y el cuerpo comienza a decaer.

Por eso, desde el versículo 2 al 6, Salomón describe de manera simbólica el envejecimiento humano. Por ejemplo, en el versículo 2, cuando dice “antes que se oscurezcan el sol, la luz, la luna y las estrellas, y vuelva la nube tras la lluvia”, hace referencia al clima invernal de Palestina, donde en invierno a menudo estaba oscuro y lluvioso, simbolizando la tristeza y falta de alegría en la vejez. En el versículo 3, “los que vigilan la casa temblarán” simboliza el temblor en las manos de los ancianos, “los fuertes se encorvarán” significa la pérdida de fuerza en las piernas, “disminuirán los que muelen” se refiere a la pérdida de dientes, y “se oscurecerán los que miran por las ventanas” señala el deterioro de la vista.

En el versículo 4, “se cerrarán las puertas de la calle” indica la pérdida auditiva, “se reducirá el ruido de la molienda” sugiere que el anciano come sin hacer mucho ruido por la falta de dientes, “temerán a los pájaros” señala que los ancianos no duermen profundamente y se despiertan con sonidos, y “las mujeres que cantan se debilitarán” alude a la pérdida de fuerza vocal.

Finalmente, Salomón dice en el versículo 5 que todos volverán a “su casa eterna”, es decir, a la muerte. Aunque todos, jóvenes y viejos, morirán, no podemos negar que los ancianos están más cerca de la muerte. Por eso, los ancianos deben vivir con la perspectiva de la muerte en mente, y los jóvenes también deben hacerlo, porque el tiempo pasa rápido y pronto llegarán a la vejez.

¿Entonces qué significa “Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud”? Se puede resumir en tres puntos (Wolbold):

Primero, “acuérdate del Creador” significa temer a Dios.

La conclusión de Eclesiastés está en 12:13:
“El fin de todo el discurso oído es: Teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto es el deber de todo hombre.”
Así es vivir recordando al Creador. En este mundo vano, los jóvenes no deben desperdiciar su vida con un futuro vacío. Para eso, deben temer a Dios, quien gobierna sobre la vida y la muerte, y seguir sus mandamientos para vivir en pureza (11:10). Así no tendrán preocupaciones ni pecados (v.10).

Segundo, “acuérdate del Creador” significa vivir disfrutando la vida en el Señor pero con responsabilidad.

Volviendo a Eclesiastés 11:9-10, Salomón anima a los jóvenes a alegrarse y disfrutar, pero también les recuerda el juicio de Dios, instándolos a alejar las preocupaciones y la maldad. La verdadera alegría viene cuando se vive con responsabilidad. La Biblia no promueve que los jóvenes vivan irresponsablemente persiguiendo cosas vacías. ¿Cómo vivir con responsabilidad? Con la perspectiva de la muerte en mente.
Miren Eclesiastés 12:6-7:
“Se romperá la cadena de plata, se quebrará el vaso de oro, se romperá la vasija junto a la fuente, y la rueda junto al pozo; el polvo volverá a la tierra, como era, y el espíritu volverá a Dios, que lo dio.”
Esto señala la muerte. Salomón dice que como todos moriremos, los jóvenes deben disfrutar su vida con fuerza y responsabilidad en el Señor. Y esa vida responsable es una vida dedicada a Dios, viviendo solo para Él, con verdadera alegría.

Tercero, “acuérdate del Creador” significa guardar fielmente la ley de Dios (sus mandamientos).

En 12:1, Salomón dice “acuérdate de tu Creador”, y este mandato es muy similar a guardar la ley (Deuteronomio 8:18, Salmo 119:55) y meditar fielmente en Dios (Salmo 63:6) (Wolbold). Es decir, “acuérdate del Creador” significa guardar fielmente los mandamientos de Dios.

¿Por qué debemos recordar al Creador en la juventud? Hay dos razones:

(1) Porque la juventud está llena de pruebas (Park Yoon Sun).
La juventud tiene el privilegio de disfrutar la vida, pero también es un tiempo de muchas tentaciones. Hay riesgo de seguir placeres vacíos en lugar de la ley de Dios, porque la juventud tiene fuerza física y mental que puede conducir a buscar la gloria vana del mundo si no se controla.

(2) Porque la juventud tiene fuerza para servir y seguir al Señor (Park Yoon Sun).
Debemos esforzarnos en la obra del Señor mientras somos jóvenes, porque cuando envejecemos, ya no podremos hacerlo. El tiempo pasa rápido, así que con fuerza y energía debemos ser diligentes en el trabajo del Señor (11:10). Para eso, debemos recordar al Creador en la juventud.

Debemos recordar a nuestro Creador en la juventud, antes de que lleguen los días difíciles y la vejez, antes que nuestro cuerpo decaiga y ya no podamos hacer nada, debemos temer a Dios y guardar fielmente sus mandamientos. Por eso, debemos vivir con responsabilidad y disfrutar la vida en la juventud. Que esta bendición esté con ustedes.

Deseando que vivan recordando a mi Dios Creador,

Pastor James Kim
(Después de cenar en un restaurante de hamburguesas con los hermanos y hermanas del coro)