“Dios, hazme un pastor como un gusano”
“Dios preparó un gusano, y a la mañana siguiente mordió la planta, y se secó” (Jonás 4:7).
Dios, que no sea un pastor desobediente como Jonás.
Que no sea un pastor que huye del lugar al que Dios lo envió.
Que no sea un pastor que olvida la misión que Dios le dio y retrocede.
Que no sea un pastor que no abraza a las almas confiadas a él con el corazón del Padre Dios.
Dios, hazme un pastor como un gusano.
Que sea un pastor que camina fielmente hasta el fin al lugar de ministerio que Dios ha preparado.
Aunque sea lento como un gusano, que camine hacia donde Dios mandó “Ve”.
Dios, que camine como una tortuga, mirando solo al destino que Dios me dio.
Que sea un pastor guiado por la misión que Dios ha preparado.
Que sea guiado por las promesas de Dios (Juan 6:1-15, Mateo 16:18).
Dios, que avance soñando solo con la visión que Dios me dio.
Que sea un pastor que obedece la palabra que Dios mandó.
Aunque Dios mande “Muerde esa planta”, que solo cumpla esa orden.
Dios, que alimente bien al rebaño confiado a mí con la palabra de Dios y lágrimas de oración.
Un pastor como Jonás, menos que un gusano,
Compartido por James Kim
(Orando para obedecer silenciosamente la palabra del Señor como un gusano)